Serie de joyas que partió del conocimiento textil y las formas de arrugas, pliegues y texturas, para llevarlas artesanalmente a piezas esculpidas en cera, que tras un proceso de fundición se convierten en latón bañado en oro. Cada joya es distinta a las demás puesto que es el resultado de un trabajo manual y como conjunto da la impresión de ser la secuela de un proceso complejo sobre un material más flexible como la seda. Esta colección de colgantes, brazaletes, pulseras, pendientes, anillos y broches plasma en su diseño una idea y ejecución laboriosa sobre la plasticidad del metal.
Lápiz de Acero 2015, categoría Joyería