En nuestra búsqueda por promover el diseño sostenible, nuestro grupo de investigación ha dedicado más de 10 años al estudio y aprovechamiento de materiales vegetales y fibras naturales para la mejora tecnológica, el desarrollo de productos y nuevos materiales. Este esfuerzo está dirigido a fortalecer las cadenas agrícolas, fomentar la economía circular y crear nuevos materiales con altos estándares de sostenibilidad, que puedan complementar o sustituir a los plásticos convencionales en determinados usos y aplicaciones. En alianza con el sector maicero colombiano, presentamos a Natuma, dos nuevos materiales elaborados a partir de los residuos del cultivo de maíz. Aprovechamos los excedentes no alimentarios de la cosecha para crear materiales resistentes y biodegradables, capaz de adoptar diversas formas mediante procesos como laminados, extrusiones por moldeo y otros. De esta manera, Natuma se convierte en una alternativa real a los plásticos convencionales en múltiples aplicaciones. NATUMA aborda problemas ambientales en la poscosecha, donde actualmente no hay sistemas para el uso de estos residuos, lo que a menudo lleva a prácticas perjudiciales como la quema. Al ser un biomaterial, ofrece una alternativa sostenible a los problemas ambientales asociados con los plásticos de un solo uso o con ciclos de vida cortos. Además, beneficia a los productores del sector maíz al convertir un residuo existente en un recurso útil y comercialmente viable. Este desarrollo no solo representa un avance significativo en términos de innovación tecnológica y sostenibilidad, sino que también demuestra el potencial transformador de la colaboración entre la investigación académica y los sectores productivos locales.
Las formulaciones del proyecto Natuma permiten obtener biopolímeros naturales y biodegradables con destacadas cualidades de aislamiento térmico y acústico. Uno de estos materiales es similar a polímeros, cartones rígidos, aglomerados y maderas comerciales, siendo un sustituto ideal para acabados arquitectónicos y autopartes. El otro material se asemeja a las espumas de poliuretano (ICOPOR), ofreciendo una alternativa sostenible para diversas aplicaciones. Ambos materiales pueden combinarse para aplicaciones específicas, permitiendo una variedad de acabados y mejorando sus propiedades con aditivos y recubrimientos. Natuma es el resultado de un esfuerzo de investigación ligado a las necesidades del sector agrícola. Nuestro objetivo en el Lápiz de Acero es visibilizar su potencial y fomentar su crecimiento y aplicación futura en colaboración con la industria. Este desarrollo es colombiano, un país que produce y consume gran cantidad de maíz. Según el Ministerio de Agricultura de Colombia, en 2020 el país produjo más de un millón de toneladas de maíz al año, con más del 45% de biomasa postcosecha sin aprovechar. Con un potencial de crecimiento positivo, considerando que los principales productores de maíz en el continente son Estados Unidos, México y Brasil, Natuma aprovecha los residuos de la postcosecha del maíz, incrementando el beneficio económico del agricultor y abordando la problemática ambiental de la quema de residuos y el uso de polímeros petroquímicos. En conclusión, Natuma beneficia a los productores agrícolas y mejora las prácticas sostenibles en cultivo y consumo. Es 100% biodegradable, ligero, con excelentes propiedades de aislamiento, versátil en acabados y formas, y capaz de reemplazar plásticos espumados en diversos sectores, abriendo nuevas posibilidades en el diseño y la producción industrial.