El arte de descubrirte a ti mismo es sumergirte en un material que nunca creías capaz de lo que sería, pero que cuando los artesanos te enseñan a mirar de otra manera los desechos, logras transformarlos en productos que ayuden tanto a las personas como a la naturaleza. En nuestras casas se consume bastante papaya, y fue así como inició este proyecto. Al ver que la basura de la cocina estaba llena de semillas de esta fruta, nos preguntamos: ¿cómo serían las canecas de las fruterías o de las plazas de mercado? Empezamos a guardarlas mientras buscábamos información y encontramos que las semillas de la papaya representan del 12 al 32% de su peso, y estas son directamente desechadas. Así, nuestro punto de partida fue pensar: ¿qué se podrá hacer con esas pepas? Teniendo ya experiencia en procesos artesanales como el uso de la lana de las ovejas o el fique, conocemos cómo los artesanos se replantean en qué pueden usar los desechos y las materias primas disponibles para crear diseños sostenibles y circulares. Así que decidimos retomar el desperdicio de las semillas haciendo un sin fin de experimentaciones y combinaciones, hasta encontrar la composición perfecta después de escuchar el material y entender su estructura textil. Utilizando procesos caseros como hervir las semillas, moler manualmente y secar al sol por más de 30 días, logramos un biotextil similar al cuero a partir de las pepas de la papaya, totalmente biodegradable, orgánico y artesanal. Puede ser usado en infinidad de procesos de manufactura también artesanales para mantener la esencia y el origen de esta creación, donde se retome el hacer manual para crear un producto, en donde las herramientas y el material mantienen un dialogo intrínseco para crear una composición armónica finalizada en producto.
Durante un período de investigación y experimentación de más de 2 años con las semillas de la papaya, hemos desarrollado y perfeccionado un bio material 100% orgánico, biodegradable y artesanal cuya composición es completamente natural. Nos apasiona la creación de moda sostenible y los procesos manuales y análogos. Esta ha sido la base para el desarrollo del material y sus posibles aplicaciones, cuyo proceso de producción se rige por un firme compromiso con la protección del medio ambiente. Hemos obtenido un material que posee similitudes con el cuero, pero que tiene otras ventajas únicas y prometedoras, presenta una resistencia excepcional para ser vegetal y permite variar su composición para lograr tanto textiles rígidos como flexibles, así como definir el grosor deseado, lo que abre un amplio abanico de posibilidades en el ámbito de la moda y la confección. Este proceso de creación artesanal, ancestral y meticuloso, refleja nuestro compromiso con el medio ambiente, y es un elemento distintivo de nuestra marca. Pero este proceso no se detuvo en la creación del material en sí, sino que ha culminado en el diseño y la confección de un variado portafolio de productos únicos haciendo uso de diversos procesos manuales. Productos fabricados con este han sido sometidos a la prueba del tiempo, manteniendo su color natural e integridad durante más de 2 años sin alteraciones significativas. En Cárica, celebramos la convergencia entre la creatividad y la sostenibilidad, y buscamos transformar la industria textil e innovar ofreciendo prendas únicas y versátiles que provienen de desechos orgánicos. El material permitiría a los clientes, una vez terminada la vida útil del producto, disponerlo como abono para plantas o devolvérnoslo para la creación de nuevos objetos, aprovechando su naturaleza biodegradable. El material y las prendas diseñadas a partir de este, son la representación tangible de un firme compromiso con el planeta, la labor artesanal y las generaciones futuras.