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La evaluación del Premio Lápiz de Acero se basa en varios criterios que tienen en cuenta requisitos creativos, técnicos, sociales, económicos y ecológicos. No todos los criterios son aplicables a cada diseño, pero brindan un marco de orientación y una base para juzgar, que se complementa con la experiencia y los antecedentes profesionales de cada miembro del jurado nominador y el CoPLA.
Este grupo de expertos está comprometido con proporcionar una evaluación justa e imparcial de todos los proyectos participantes. Los jurados evalúan cada proyecto de acuerdo a la información que entrega en la sección 1 del formulario de inscripción. La información sobre el autor, la empresa cliente y la empresa productora no son parte de lo que ellos conocen al momento de debatir sobre cada proyecto.
Los criterios de evaluación incluyen lo siguiente:
Capacidad de romper paradigmas. ¿El diseño se destaca, proporciona algo nuevo al mercado o complementa/mejora un producto o servicio existente?
Valora la eficiencia en el cumplimiento de la tarea para la que fue creado, incluyendo la facilidad de uso, la ergonomía, la seguridad y el mantenimiento. ¿El diseño cumple con el propósito previsto y las necesidades del usuario?
La calidad y longevidad del diseño de acuerdo a su función.
Proporción y concordancia adecuada a nivel estético, valor formal, color, textura, acabado, ingeniería, material utilizado.
Los beneficios entregados al usuario y/o a la sociedad por el diseño incluyendo impacto ambiental, ecológico y social.
Criterio subjetivo que va más allá de cumplir con su propósito práctico, ¿el diseño genera una conexión emocional o sensitiva?